Reparación de crédito: Cómo hacerlo usted mismo y no caer en engaños

Si no tiene buen crédito, es posible que tenga dificultades reuniendo los requisitos para obtener una tarjeta de crédito, alquilar un apartamento o incluso obtener un préstamo personal. Para ayudarle a ser un mejor candidato, las compañías de reparación de crédito le ofrecen mejorar su perfil crediticio a cambio de una cuota.

Por lo general, estas compañías ofrecen revisar sus informes de crédito, y solucionar por usted los elementos negativos que se puedan con las agencias de crédito.

“No es difícil hacer la mayoría de estas cosas uno mismo”, comenta Bruce McClary, Vicepresidente de Comunicaciones de la Fundación Nacional de Asesoramiento Crediticio (NFCC, por sus siglas en inglés). “Hay que poner en la balanza el costo-beneficio de pagarle a alguien más para que haga esto por usted, frente a hacerlo usted mismo y perder tiempo valioso”.

Usted ve los anuncios en los periódicos, en la televisión y en internet. Recibe panfletos por correo, mensajes de correo electrónico e incluso recibe llamadas telefónicas para ofrecerle servicios de reparación de crédito. Todos dicen lo mismo:

“¿Problemas de crédito? ¡Ningún problema!”

“¡Podemos remover para siempre de su archivo de crédito bancarrotas, juicios, gravámenes y préstamos impagos!”

“Podemos borrar sus malos antecedentes de crédito — 100% garantizado”

“¡Cree una nueva identidad de crédito legalmente!”

Hágase un favor, y de paso, ahorre algo de dinero. No se crea este tipo de declaraciones: es muy probable que sean signos de una estafa. De hecho, los abogados que trabajan en la Comisión Federal de Comercio (FTC, por su sigla en inglés), la agencia nacional de protección del consumidor, dicen que nunca han visto que una operación de reparación de crédito legítima haga este tipo de declaraciones. La verdad es que no existe ninguna solución rápida para recuperar su solvencia crediticia. Usted puede mejorar su informe de crédito legítimamente, pero le llevará tiempo, esfuerzo y tendrá que mantenerse firmemente apegado a un plan personal de repago de sus deudas.

Analice cómo funcionan las compañías de reparación de crédito y, si piensa contratar una, considere primero orientarse con una agencia de asesoramiento crediticio.